Permite articular mecanismos en colaboración con las comunidades autónomas para:
El apoyo específico de las necesidades de conciliación de las familias con niñas, niños y jóvenes menores de hasta 16 años.
La creación de empleo, la dignificación y reconocimiento de la experiencia profesional de cuidados.
La sensibilización en materia de corresponsabilidad.
La articulación de bases informativas de recursos disponibles en este campo.